4.8.15

Mis cuentos: La coz...


... y en resumen, qué fue: ¿Milagro? ¿Manipulación? ¿Truco? ¿Fenómeno inexplicado? ¿Accidente?...

De hecho, cuando Felipe acudía ese día al besapiés no es posible que hubiese podido imaginar lo que le ocurriría, a él que era de misa diaria, a él Conciliario en la Hermandad del Dulce nombre, a él casto por convicción, a él ejemplo de virtudes para el grupo de adolescentes a los que guiaba y conducía en los encuentros de convivencia mensuales,... ¡A él!

Y mira que, de un tiempo a esta parte, parecía que el camino se le había empezado a torcer, su ridículo en el acto de defensa de la tesis doctoral  con abucheo incluido y el posterior acuse de plagio, el fracaso (a pesar de toda la estrategia desplegada) en las elecciones a hermano mayor, el desaire que le hizo Antonio (cuando tan sólo y después de tanto pensarlo le había verbalizado sus viejos anhelos), el descubrimiento de algunas de sus pequeñas e inocentes mentirijillas, la boda de su hermana... ¡Ay, esa es otra!, la verdad es que Elsa, ¡cuántos disgustos! primero con su falta de preparación académica e interés por la cultura, después con empezar a trabajar de cajera y ahora casarse con el muerto de hambre y encima embarazada, ¡qué parecen dos imbéciles con tantas carantoñas!
La verdad es que Elsa iba a provocar que tuviesen pronto que subirle la dosis de Lorazepam para poder conciliar el sueño. Y ya el remate de los últimos días fue cuando en su lectura del acto de apertura de las jornadas preparatorias del periodo de Adviento de la Hermandad, se presentaron sin avisar sus padres. ¡Papá con las manos con restos de grasa! ¡Y con la chaqueta de franela de cuadros! ¡Que no vendría con el mono porque Mamá no le habría dejado! ¡Señor, qué disgusto!

Si es que los hechos lo anunciaban... algo tenía que ocurrir, pero cómo lo iba a imaginar...

La cola formada, D. José María en el púlpito diciendo mientras avanzábamos "Bienaventurado el que, dejando a parte su gusto e inclinación, mira las cosas en razón y justicia para hacerlas, ahora, Señor, regálanos  tu Gracia y Justicia, a cada uno tantas como nos merezcamos"

La fila avanzando hacia el bendito talón, Felipe, gracias a alguna que otra estratagema, el primero (que a él besar el talón después de otros le da mucho asco),  cuando acercaba sus labios al bendito talón... doña Angustias que estaba en la primera fila gritó, asegura ¡que la imagen giró la cabeza y cuando lo vio le dio tremenda coz!

El hecho es que, no se sabe muy bien cómo, Nazareno y Conciliario cayeron hecho un revoltijo provocando el caos total en la Iglesia. A Felipe, pálido, sangrante, histérico y quejoso; lo llevaron a urgencias, el doctor que le atendió preguntó, mientras le cosía la herida en forma de 6 que se le había hecho en la frente, que si había sido jugando al fútbol, ante el nivel de incomprensión de los asistentes ante semejante pregunta argumentó que una semana antes había cosido una idéntica a un portero tras la patada recibida de un delantero muy, muy bruto.

Doña Angustias ahora, tras la obligada restauración a la que fue sometida la imagen después del accidente, asegura y repite constantemente que Nuestro Padre Jesús tiene una especie de sonrisa socarrona.

¡La pobre, qué mayor está!


Un saludo a tod@s

La buena fe es el fundamento de toda sociedad, la perfidia es la peste.
Platón (427 AC-347 AC) Filósofo griego.

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