15.9.11

El castillo de naipes...

No sé, supongo que sí, si alguna vez habéis montado un castillo de naipes...
Construir cualquier cosa siempre es una experiencia ardua pero muy gratificante, si como suele ser habitual es fruto de un trabajo en equipo la experiencia es aún mejor y cohesiona al grupo...
...hasta aquí todo muy bien. El problema viene cuando fruto de las prisas, la presión, la autoconfianza o una mezcla de todo, el castillo cuando ya estaba prácticamente montado se desploma...
...o lo que es aun peor, como coordinador del equipo compruebas como has colocado una pieza errónea en la base del castillo y no hay más remedio que desmontarlo y volverlo a montar (ahora en tiempo récord).
Caras de frustración, sentimiento de culpa máxime hacia el equipo que diriges al que después de un esfuerzo titánico, no sólo no le puedes regalar el merecido descanso si no que hay que redoblar esfuerzos...
...parece que esta vez el castillo ha sido montado con éxito. Como siempre sacamos mensajes positivos...
...hay quien dice que ahora se nos quiere más, que no siempre se digiere bien la infalibilidad...
...hay quien dice que nos ha servido para corregir errores del anterior...
...a mi sólo me ha servido, para apreciar aun más la calidad de la gente con la que trabajo y para dar gracias de su paciencia y confianza inquebrantable en mí.

Respecto a Dña Esperanza... no sabe lo que habría hecho ayer con sus 20 horas... pero ese es otro tema...

Un saludo a tod@s



Jamás viene la fortuna a manos llenas, ni concede una gracia que no haga expirar con un revés.

William Shakespeare 
(1564-1616) Escritor británico
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