Son muchas ya las veces que, por unos u otros motivos, he visitado esta ciudad, y por mucho que lo hago no deja de maravillarme, sorprenderme y encandilarme una y otra vez. Son incontables los detalles en los que podría entrar para describirla: oferta cultural (conciertos, teatros, museos...), de ocio (pubs, paseos, atracciones, tiendas, visitas, monumentos...) histórica, deportiva, gastronómica (sí, sí...han leído bien...) turística... Pero, sin lugar a dudas, a mí hay una oferta que me fascina absolutamente en esta ciudad: su diversidad cultural, religiosa, racial... su marcado carácter cosmopolita que hace de sus habitantes unas personas absolutamente tolerantes con el diferente, puesto que es casi imposible coincidir en nada, ello provoca que sea una ciudad en la que, por muy distintas que sean sus costumbres, por muy marcado que tenga sus tempos y su ritmo vital en el sitio en el que se encuentra, puedes siempre hacer lo que quieras y te hace sentir y disfrutar de la libertad en el amplio sentido de la palabra.
No dejo de comprender, que para vivir en ella, debe ser una ciudad agotadora, agreste e incluso agresiva: las distancias son enormes, la sensación de soledad o aislamiento puede ser terrible en un sitio así... Pero esas serán sensaciones y vivencias que podré transmitir el día que consiga irme a trabajar una temporada larga allí, hasta ahora mis estancias han sido lo suficientemente cortas para no poder percibir ese otro punto de vista...
Pues lo dicho 12:00 p.m. en Covent Garden!
Un saludo a tod@s
Cuando apuntas con el dedo, recuerda que tres dedos te apuntan a tí.
Proverbio inglés.
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