8.1.11

El dedo en la llaga...


Sabemos que la libertad es uno de nuestros más preciados bienes, los derechos de cada uno terminan justo donde empiezan los del prójimo...
¿A qué viene esto? Pues a la nueva Ley sobre el consumo de tabaco. Lo siento, siento mucho todos esos fumadores que ven pisado sus derechos a ahumarnos el abrigo, el pelo, la comida y el ambiente... que sí, que ellos tienen derecho a fumar, que ellos tienen derecho a ese placer de regar con su humo el ambiente de todos los demás.
¿Recuerdan cuando se podía fumar en TODOS sitios? ¿Recuerdan lo incongruente de entrar en la consulta de un médico y que estuviera fumando? ¿O qué los profes fumaran en clase? ¿O que se fumara en los transportes públicos?
No me nieguen que ahora cuando ven imágenes similares o de nuestra antigua España o de países donde aún se haga, no sienten incluso vergüenza ajena...
...pues estoy convencido de que algo similar nos ocurrirá en un poco espacio de tiempo cuando veamos imágenes similares de bares y restaurantes "irrespirables".
Por otra parte también pienso que todo esto se debe hacer con "cordura", con tolerancia y sin "acritud". Como con todas las leyes se debe cumplir y sancionar a los que la incumplan, pero no debemos imitar a culturas mucho más hipócritas que la nuestra y entrar en histerias colectivas como la de no poder fumar en las calles o similares...
...de todas formas toménselo todo con paciencia, los jóvenes solucionarán esto y terminarán con las polémicas, al contrario de lo que se piensa, las nuevas generaciones son mucho más tolerantes y están mucho más preparadas (en general) de lo que se dice por ahí, y sin duda que los mayores...
Un saludo a tod@s


Al cumplir los setenta años me he impuesto la siguiente regla de vida: No fumar mientras duermo, no dejar de fumar mientras estoy despierto, y no fumar más de un solo tabaco a la vez.
Mark Twain (1835-1910) Escritor y periodista estadounidense.

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