20.10.09

Jubilar al Maestro...


Si ya está inventado en el Ejercito ¿Por qué será que la Administración no se copia a sí misma en lo bueno?...

Intento explicarme... Cuando los Suboficiales (Sargentos o Sargentos Primeros) se hacían mayores(uso el pasado porque hablo del Ejercito de cuando había "Mili") los convertían en Brigadas o Subtenientes y seguían siendo útiles pero bregaban menos con la Tropa que era lo que los "quemaba".

Nos visitan periódicamente al IES dos magníficas profesoras (Dos MAESTRAS con mayúsculas) que se jubilaron hace un curso. En conversaciones recurrentes con ellas me comentan lo dispuestas que hubiesen estado a continuar trabajando, pero ya de otra forma, o con menos tiempo con el alumnado, se jubilaron a los 60, y... ¡cuánto bueno hubiese sido que hubiesen seguido trabajando!, ¡qué desperdicio de capital humano!, ¡de saber!, si me apuran ¡de dinero!

Todo porque nadie se ha dado cuenta, de lo útil que puede ser un buen profesor asesorando o tutorando a "los nuevos que llegan", pero no pretendamos que continúen siempre con la misma labor, aquí nunca nos hacen Brigadas...

Se me ocurren montones de ejemplos, sólo en los Centros de El Viso.
Como diría un conocido:

"Yo cada año tengo un año más y estos c... siempre tienen 15 años"

En fin algún día se le ocurrirá a alguien.

Un saludo a tod@s

Siempre que enseñes, enseña a la vez a dudar de lo que enseñes.

José Ortega y Gasset (1883-1955) Filósofo y ensayista español.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Cuanta razon...
Pero me gustaria hacer un inciso.
Precisamente en vuestra profesión es donde más se ha devaluado la figura del "maestro". Me explico. Desde un tiempo acá estoy convencido de que para desarrollar en condiciones algunas profesiones, sino todas, se necesita: Formación (mucha, mucha), Criterio (formación+inteligencia), vocación (que es fundamental) y experiencia. Esta última, la experiencia, la podemos suplir en los primeros tiempos con el tutelado de un "maestro" del que aprendemos, alguien que nos inicia, nos guía. Pues precisamente en el profesorado sería necesario fomentar esa figura, la del maestro de maestros, desde el punto de vista del que aprende.
Estoy convencido de que para esta tarea son idóneos estos profesores de los que nos hablas.

Un saludo.

Anastasio Pineda dijo...

Me alegro que coincidamos, de hecho siempre pensé que la fase de prácticas, que en el profesorado no deja de ser un trámite burocrático, debiese ser algo así como lo que hacen los médicos: un tiempo a cargo de un "maestro de maestros". Pero no, aquí te mandan a "enseñar y educar" desde el minuto 1, sin ningún tipo de adaptación o formación inicial. Así nos luce el pelo.
Un saludo