28.8.15

Una buena persona...


Muchos son los halagos que has recibido estos días, amigo. Me alegro, me congratulo de ello, no merecías menos.
Aún no he salido totalmente del shock que me produjo el momento impactante en que conocí la fatal noticia. Desafortunadamente ya conocía esa sensación. Pasas en instantes de la incredulidad a inmediatamente necesitar que alguien responda a todas las preguntas que fluyen por tu cabeza. Cuando lo realmente cierto es que todas las respuestas a todas las preguntas se sintetizan fácilmente en una sentencia, una sentencia que el autor de mis días repetía siempre en estas ocasiones:
Para morirse sólo es necesario estar vivo. Y tú lo estabas, vaya si lo estabas.

He escrito y borrado mucho en este post, he dudado si publicarlo o dejarlo, como ha ocurrido con otros, escrito pero sin subirlo al blog, no quería pecar de pastoso sensiblero pero tampoco quería ser indolente con una muerte, la tuya, muy sentida. Finalmente he decidido publicarlo, siempre se dice que los homenajes en vida pero quién iba a pensar en ponerse a darte homenajes para ello tendríamos que haber pensado (o nos tendrías que haber avisado) que te ibas a ir.

La verdad es que podría hablar mucho  y bueno de ti, fuiste buen vecino, tendero, cliente, amigo, te interesaste por mí, me ayudaste a generar inquietudes, a amar el cine y las artes en general, compartimos muchos momentos de amigable tertulia. De los ratos de mi vida en los que tu imagen aparece en ella, me voy a quedar con dos: el estreno de la obra que dirigiste de Arrabal (cómo ha llovido desde entonces), con Arturo y María como protagonistas (no recuerdo bien, pero creo que era el Triciclo). Y otro mucho más reciente que fue el momento compartido cuando me propusiste como Pregonero (quiso el destino que Carlos no lo pudiese hacer y te tocó a ti planteármelo).
Sé que nuestra relación ha sido un cúmulo de agradables y pequeños momentos, que estos días gente mucho más próxima a ti y en los que no has dejado un pequeño agujero en sus vidas sino un tremendo socavón tendrá mucho más que hablar y que añorar de ti.

Yo, desde aquí, sólo pretendo dedicarte un pequeño homenaje, decirte que las múltiples muestras de cariño que se han derramado en los medios y en las redes sociales, el montón de frases y palabras escritas o dichas para expresar el dolor, no pueden reflejar el vacío que se notaba en tus familiares, amigos, vecinos...¿ A quién darle el pésame? si en el funeral todos teníamos cara de máximos afectados. Sólo lo hice con una persona y porque le vi la cara de tristeza mayor que había visto en mucho tiempo.

De gente imprescindible están los cementerios llenos... es una cita famosa a la cual en alguna película de tu amado cine se ha hecho referencia, probablemente sea cierta, pero desde luego a muchos y al unísono nos va a ser muy complicado sustituirte.

Un fuerte abrazo amigo Manolo, allí dónde estés.

Un saludo a tod@s.

Mañana es sólo un adverbio de tiempo.
Joan Manuel Serrat (1943-?) Cantautor español.

No hay comentarios: