No sé si le pasa a todo el mundo, si es mi cuna particular, si es una obviedad... pero yo no termino de acostumbrarme. La verdad es que no es sólo por la "caló" en sí misma, lo que peor me sienta es el estado de sopor e inactividad que me crea. No es que yo sea un derroche permanente de energía y actividad...
...pero esto de caer acarajotado por el calor tras el almuerzo, o de no tener ganas de hacer actividades hasta las 10 de la noche lo llevo fatal...
... de hecho últimamente mi escapada estival intento que sea en periodo máximo de canícula y, a ser posible, a algún sitio donde en lugar de parecer que he cambiado de ubicación parezca que he cambiado de estación...
...suerte que ayer (y hoy) ha llovido, claro que nunca llueve a gusto de todos...
En fin ya pronto estará aquí nuestra romería o la carrera "Corazón de los Alcores" que sobre todo me alegran porque ahí ya se ve de verdad el final del verano, que no es especialmente mi estación favorita. De hecho creo que una de las pocas cosas que me gustan del verano, es que paso infinidad de tiempo con Moisés. Por lo demás con una semanilla de caló tenía yo de sobra...
Al menos como no hago otra cosa, leo más que en el resto del año.
Un saludo a tod@s
Repara tu trineo en el verano, y tu carreta en el invierno
Proverbio armenio
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