20.2.10

Los Ingenieros, los malos de la película...


Lo siento, pero a veces reflexiono y pienso en cuánta hipocresía generamos cada día y llego a ponerme enfermo...
...resulta que todos quisiéramos vivir en un mundo tipo "Pandora" lleno de pajarillos y aves por doquier, donde las aguas fluyesen a su libre albedrío y los bosques copasen todo el terreno (les garantizo que me encantan los espacios naturales)...
Pero, ¡Oh cielos, que horror! (¿Recuerdan a Tristón?) también queremos llegar lo más pronto y barato a nuestro destino, viajar, abrir el grifo y que salga agua, llamar por teléfono, usar el móvil, navegar por internet, pellizcar la pared y que se encienda una luz, tener comida suficiente y variada, etc, etc, etc...
En eso consiste el desarrollo sostenible, un complicadísimo equilibrio entre conservacionismo y desarrollismo...
... y en medio de todo, en el centro del huracán: los ingenieros, que son los profesionales que solucionan problemas o cubren necesidades. Complicada papeleta.
Valga un ejemplo: En España si no se embalsase agua, sólo tendríamos para un 10% de la demanda, pero no cabe duda que los embalses son ecológicamente y paisajísticamente un disparate. Con lo cual, a veces, tenemos que elegir, conservar o beber...
Complicado, realmente, complicado...
Un saludo a tod@s

No basta tener buen ingenio; lo principal es aplicarlo
René Descartes (1596-1650) Filósofo y matemático francés.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Creo que tu ejemplo no es el más adecuado, porque planteas un dilema que no es del todo cierto. La cuestión no es negro o blanco. El desarrollo sostenible consiste en aprovechar mejor los recursos, no derrochar el agua, la energía, etc... Y ser respetuosos con el medio ambiente.
En nuestro pueblo, por ejemplo, se arrancan los árboles de las calles y algunos lo ven bien, se baldean las calles y casas con agua potable, se lavan los coches en la calle o en solares. Se construyen edificios sin tener en cuenta las energías renovables. La piscina cubierta de hace menos de 3 años, tenía una caldera de gasoil, ahora nos gastamos otra vez el dinero en cambiarla por una menos contaminante (y menos mal que lo vamos a hacer).
Nos gastamos una millonada en una rotonda con luces, pero la luz no es de placas solares y el agua es de un pozo de construcción ilegal (el viso esta en zona saturada de pozos).
Sabías que se pierde gran cantidad de agua en las tuberías, y que el viso abandono su acuífero, que podría utilizarse para uso de riego de parques y jardines.
La solución no está en construir más pantanos, sino en aprovechar mejor los recursos, somos los habitantes los que tenemos la solución:
Cierra grifos, consume con moderación, instala aparatos que ahorren energía, exige menos envoltorios en los productos que consumes, no dejes encendida las luces que no necesites, no llames por teléfono si no hace falta, coge el coche solo si es necesario, pide a tu ayuntamiento que mantenga los árboles de las calles y plazas y que ponga más.

Precisamente este año es el año de la biodiversidad, debemos exigir que se cuide y proteja.

Con la Cruz y a lo loco dijo...

Los ingenieros en su inmensa mayoría son simples trabajadores más preocupados por llevar a su casa un sueldo que por tener en la cabeza un modelo tecnológico respetuoso con el medio en el que vivimos y mucho menos con un modelo social justo. Son trabajadores que no se diferencian en gran cosa de los de otro rango, la diferencia solo la veo en los conocimientos técnicos que poseen, pero no en la conciencia sobre que mundo estamos creando. Los ingenieros ni son malos ni son buenos, son personas.

Yo no creo que sea una hipocresía querer beber agua de calidad y al mismo tiempo querer conservar el medio, pues sin duda, sino conservamos el medio no tendremos agua de calidad, y este ejemplo lo podemos trasladar a la sanidad, el transporte, la energía, la alimentación… más bien creo que la hipocresía está anclada en los que quieren disfrutar de todo dándole la espalda a la naturaleza, o sino cuantas veces hemos escuchado en una comida eso de “esta fruta no sabe a nada”, pues eso, si queremos fruta de calidad tendremos que tener un proceso productivo respetuoso con el medio, de lo contrario, nos creeremos en un país desarrollado por ver que las estanterías de cientos de hipermercados están abarrotadas de fruta, pero fruta que no sabe a nada.

El hombre para cubrir sus necesidades básicas está obligado a alterar la naturaleza, eso se viene dando desde que existe la especie humana en la Tierra y no podemos pretender que nuestro planeta sea un paraíso virgen en toda su extensión, pero lo que roza la locura es querer crear un mundo lleno de facilidades y comodidades que subsistan agotando los recursos naturales y provocando la explotación de nuestros semejantes (o es que no es irracional que cambiemos a cada instante de coche, móvil, ordenador, lavadora, ropa, juguetes… o ya puestos de aceras, pavimentos, balastros, adoquines, rotondas… que en nada nos ayuda a vivir mejor, en todo caso a continuar como estábamos, pero que provocan la destrucción de los ecosistemas naturales).

Otra cosa es el desarrollo sostenible, el decrecimiento, o el crecimiento del que todos los grupos con conciencia social hablan. Lo que está claro es que el crecimiento no ha conducido a la felicidad al conjunto de la humanidad, solo ha conseguido colmar de lujos a una porción muy pequeña de la sociedad a costa de mantener en la penuria al resto de la población mundial. El desarrollo sostenible ya también se está poniendo en duda pues dicho modelo implica que la palabra maldita para media humanidad continúe siendo el eje, es decir, el desarrollo. Y ya comienzan a ser cada vez más los discursos que hablan de un necesario y obligatorio decrecimiento, un decrecimiento en los países alocadamente desarrollados para posibilitar un desarrollo sostenible en los países subdesarrollados, y de esta forma asegurarnos que todos continuemos avanzando en la historia de la humanidad, ya que de lo contrario, no habrá futuro para nadie. En ciertos ambientes ya se habla de un OBLIGATORIO DECRECIMIENTO, al igual que hace unas décadas se hablaba del cambio climático que se nos venía encima.

Anónimo dijo...

Iba a decir una cosa....pero ante tan desarrollados argumentos he perdido el hilo de la conversación.

un saludo

Anastasio Pineda dijo...

Idem...

si yo lo que digo es que "no matemos al mensajero"

Un saludo

Con la Cruz y a lo loco dijo...

Celósime, te ruego hagas un esfuerzo en no perder el hilo para poder ensaltar la aguja con la que remendar, el tema de tecno-viso se lo merece.

Tecno-viso, por Dios, no te des por muerto, que mejor estás vivito y reflexionando.

Anónimo dijo...

Si os ponéis así, yo prometo que no opinare más sobre los temas que habléis, es más, prometo no entrar más en estas páginas.

Anastasio Pineda dijo...

Nada, hombre/mujer, puedes opinar de lo que quieras y cómo quieras o leer o no leer, pero evita (si quieres) ser tan susceptible y deja que los demás también opinemos lo que nos parezca.
Un saludo

Con la Cruz y a lo loco dijo...

Tecno-viso, me parece muy interesante la introducción que haces a la hipocresía en nuestro modo y modelo de vida. También me parece muy respetable la contribución que cada participante a dado a tu introducción con los ejemplos que han creído más convenientes, y en estos ejemplos hay que descartar susceptibilidades para barajar destellos hacia la comprensión.

Yo me esfuerzo por no perder el hilo, el hilo de la comprensión mutua, comprensión desnuda de prejuicio y susceptibilidad, susceptibilidad que encierra y rompe el diálogo, diálogo que hace que la gente se entienda.